Los bucaneros traen de Oriente especias, pócimas y afrodisíacos, algunas esclavas, joyas de aguamarina, todos se agolpan a posesionarse de las gangas, los extranjeros vuelan hacia el pasado, a sus costas sin aura, igual a ésta pero con menos algarabía, gnomos se disfrazan para divertir a los infantes por monedas de cobre mientras los semidioses ríen con sarcasmo, guiñoles de hojalata se deprimen al verse oxidados, se tiran desde los peñascos y ser parte de un motín todavía desconocido.
Venden las noticias del día que zarparon cuyos titulares expresan el dominio de los reyes ante las anfetaminas, de fugitivos proxenetas, encueratrices follando en un talk show para sordomudos, dan misivas de familiares aburridos de sus catacumbas, una epístola llega a mi nombre Leirbag, así me bautizó el mar al morir, el remitente con una salitrosa caligrafía dice: “Prefiero tú”, a solas sonrío al saberme amado por su denuedo.
*Inspirado en la canción de Chak: Prefiero Tú
